LO MEJOR DE LA SEMANA

viernes, 29 de julio de 2011

Juan Martinez Cerrillo una obra consagrada al Arte



En este nuevo artículo de Montoro Cofrade haremos referencia a un imaginero de vital importancia en la Semana Santa de Córdoba Capital, ese imaginero del que hablamos es Juan Martínez Cerrillo. Este gran imaginero que nos ha dejado varias obras muy conocidas y queridas para nuestro pueblo. Desde las lineas de este blog queremos hacer un sencillo repaso por la vida y obra de Martínez Cerrillo.
Juan Martínez Cerrillo realizando una de sus grandes pasiones, la pintura.


Hablar de Martínez Cerrillo es rememorar la Semana Santa de una época. Época de una España en Blanco y negro y recién salida de una guerra civil, donde la penuria, la escasez y tristeza eran las tónicas generales de un pueblo. España trataba de olvidar por todos los medios el drama vivido. Drama que había desolado el país y que a su vez había servido, con injustificados fundamentos, para que gentes sin razón ni escrúpulos causen la destrucción de numerosas imágenes sagradas. Por ello había que reponer en los camarines de nuestras iglesias efigies de Cristo, María y santos que sirvieran para restituir los perdidos. Esa fue la causa principal de que Juan Martínez Cerrillo entra en la escena de la imaginería. Cerrillo es un imaginero hijo de su época. Al igual que Castillo Lastrucci en Sevilla, Lainez Capote en Cádiz, o Navas Parejo en Málaga, Martínez Cerrillo es el encargado de paliar, restituir y reparar los daños hechos al patrimonio artístico de la iglesia y cofradías destruido en la incivil contienda de años atrás.


A continuación expondré algunas de las principales pérdidas en imágenes que nuestro pueblo sufrió tras la Guerra Civil:
























Imagen del Santo Sepulcro en 1904. Por suerte la urna de plata que observamos si se conserva y es la usada para realizar Estación de Penitencia con el Cristo Yacente de Enrique Ruiz Flores.

Altar de San Bartolomé durante una Novena a la Virgen de Lourdes en 1924. Para mi una de las grandes pérdidas a nivel artístico que sufrió nuestro pueblo tras la contienda civil.

Imagen del Cristo de la Humildad en Santiago hacia 1920. Podemos observar a muchos de los integrantes del Coro de la Humildad.

Imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno hacia 1890. Sin ninguna duda a nivel devocional fue la mayor pérdida que Montoro sufrió debido a la Guerra Civil. 
Como curiosidad podemos decir que algunos de los dedos de esta desaparecida imagen lo conserva una familia particular de nuestro pueblo. 
Es así, con muchísimas limitaciones técnicas, propias de un artista en el inicio de su carrera, con pobres materiales, rapidez en la ejecución y con escasos ingresos económicos por su trabajo, como Juan Martínez Cerrillo se ve abocado a convertirse en escultor-imaginero, pues aunque todo escultor no es necesariamente imaginero, todo imaginero es siempre escultor.

Analizando la información para constituir este artículo leí una entrevista que se le realizó al imaginero. Una de sus frases me sobrecogió sinceramente, “… yo he sido lo que Córdoba ha querido que sea.”. En esta frase, el polifacético artista reconocía que, como tal, se había entregado a la ciudad, sin importarle nada sacrificar otras disciplinas artísticas, como la pintura en la que se encontraba mas cómodo y mejor formado, para dedicarse a la imaginería sacra, faceta que le era desconocida y que tuvo que ir asimilando poco a poco de forma autodidacta; aunque, cuando tuvo la ocasión de obtener formación de otros artistas, la toma sin complejos, caso del aprendizaje de la técnica del sacado de puntos que adquirió de Juan de Ávalos o sus contactos artísticos con el sevillano Fernández Andes.
Cerrillo besando la mano de Nuestra Señora de la Paz y Esperanza de Lucena

Juan Martínez Cerrillo nació el día 4 de Octubre de 1910 en la localidad cordobesa de Bujalance. Desde niño su facilidad para las artes plásticas es más que notoria, lo que lleva al maestro de la población, a aconsejar a sus padres a viajar y fijar su domicilio en la capital, al objeto de que el pequeño estudie en la Escuela de Artes y Oficios.

La familia se traslada a Córdoba y el pequeño Juan ingresa como aprendiz en el reputado taller de Rafael Díaz Fernández. Allí comienza a familiarizarse con los trabajos propios de un taller y a la vez conocer los conocimientos básicos de dibujo, pintura y restauración. La formación académica la toma en la Escuela de Artes y Oficios “Mateo Incuria”. 
Juan Martinez Cerrillo en su taller.

La pintura fue siempre su principal pasión y con un premio en metálico obtenido en un concurso convocado por el Ayuntamiento de Córdoba, Martínez Cerrillo viaja a la capital hispalense donde presencia la Semana Santa Sevillana. El esplendor, la brillantez y la riqueza de las cofradías de la ciudad vecina, impresiona al joven artista, que pronto comienza a madurar en su cabeza, la idea de realizar una imagen sagrada. 
Uno de los tantos dibujos que Martínez Cerrillo realizó acerca de la Semana Santa Cordobesa.

Realiza algunas de pequeño formato, destinadas al culto familiar y otras de mayor tamaño que le son encargadas por los Hermanos de San Juan de Dios. Esta última obra le supone su carta de presentación en el campo de la imaginería. La guerra le lleva a independizarse del taller de Díaz Fernández y establecer uno propio. Es allí, durante los permisos obtenidos durante la contienda, donde talla sus dos primeras imágenes a tamaño natural.                                                                  En imagen vemos a la actual Virgen de las Lágrimas de Jaén. Me sorprende el gran parecido que posee con Nuestra Señora de los Afligidos de Montoro. 
A continuación realizaremos un pequeño recorrido por la obra como imaginero de Juan Martínez Cerrillo:

Virgen de la Soledad para la Hermandad de su mismo nombre de El Carpio
















Ntra. Sra. de la Paz y Esperanza, la primera dolorosa para la Semana Santa de Córdoba.para la que tallaría más tarde la imagen del San Juan Evangelista que la acompañaba antiguamente, así como el camarín forrado de guadamecíes de la misma. Más tarde esta imagen pasaría a estar en manos de la cofradía de los Estudiantes de Jaén, recibiendo el nombre de Nuestra Señora de las Lágrimas.











Ntro. Padre Jesús Nazareno de Montemayor (Córdoba).





















Santísimo Cristo de la Humildad de Montoro.




Ntra. Sra. de los Afligidos para la Cofradía de la Vera Cruz de Montoro.
















Jesús orando en el Huerto de los olivos, podemos observar diferencias en el rostro de Jesús tras las restauraciones sufridas.


Ntro. Padre Jesús de la Sentencia de Córdoba,como curiosidad podemos citar que en un principio llevaba las manos  atadas a la espalda. Este Cristo nos  confiere una actitud de serena nobleza y dignidad.


















Ntro. Padre Jesús de la Humildad y Paciencia para la Cofradía de la Paz así como las tres figuras que lo acompañan en el misterio (un Cirineo, un romano y un sayón).



















María Santísima de la Esperanza que sustituyo a la anterior imagen  de propiedad particular. La antigua imagen  procesionaba junto a la Hermandad desde 1940.



















Ntra. Sra. de la Alegría, imagen que sustituía a la que hasta entonces procesionaba la Hermandad del Resucitado.
















 
Ntro. Padre Jesús de las Penas para la Hermandad de la Esperanza. Personalmente me llama la atención su semblante lleno de mansedumbre,  claro exponente de la sensibilidad artística del autor.


Ntra. Sra. de la Piedad para la Hermandad del Prendimiento. Igualmente realizó un medallón de cuero repujado con la efigie de María Auxiliadora para su techo de Palio.



















Ntro. Padre Jesús de los Reyes en su Entrada Triunfal en Jerusalén. Debemos resaltar que las figuras secundarias de este paso han sido realizadas por el imaginero villarense Sebastian Montes Carpio.


















En esta misma línea, el imaginero de Bujalance desempeña también una labor importante como restaurador de imágenes titulares de culto ajenas a su gubia, pudiéndose señalar, entre otras:



Titulares de la Hermandad de La Pasión de Córdoba, restaurados por Martinez Cerrillo

Finalmente, para poner el broche de oro a nuestro artículo,no se puede terminar esta breve síntesis de la obra de Juan Martínez Cerrillo sin reseñar que también realizó obras de carácter general o retablos como los de Bujalance, Cañete de las Torres, Aguilar de la Frontera o Villaviciosa.

No he comentado las obras de Martinez Cerrillo en Montoro con profundidad porque mas adelante tengo intención de crear un articulo para estas tres obras.

1 comentario :

  1. En Málaga se venera una imagen de la Virgen de Araceli, Titular de su Cofradía Filial malagueña, obra de Martínez Cerrillo, ver www.virgendearacelimalaga.com

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